Desde hoy, ya podemos presentar la declaración de la renta si somos residentes fiscales en Bizkaia. Todavía no me ha dado tiempo a echarle un vistazo al borrador, pero como supongo que las pautas a seguir para declarar los dividendos cobrados o los beneficios obtenidos en la compra/venta de acciones serán muy similares a las del año pasado, aquí os dejo el manual que publiqué en el blog en abril del 2021.
Cuando el próximo fin de semana me siente tranquilamente a rellenar los datos, este manual me será de muchísima utilidad y me ahorrará bastante tiempo y no voy a necesitar mirar otros blogs ni leer las instrucciones que proporciona la misma Hacienda para saber dónde y cómo tengo que introducir los datos necesarios para realizar la declaración de la renta.
Turbulencias este mes en los mercados debido básicamente a las noticias relacionadas con quiebras o posibles quiebras de ciertos bancos importantes a nivel mundial.
Todo comenzó el jueves 9 de marzo con las acciones de SVB (Banco de Silicon Valley) desplomándose más de 60% y empujándolo hasta su quiebra. La subida de la inflación tan vertical le hizo tener que vender sus bonos del tesoro para poder llevar a cabo sus compromisos, y tras conocerse este hecho varias empresas de capital riesgo aconsejaron a sus clientes que retiraran el dinero de SVB, contribuyendo esto al pánico bancario, al desplome de su cotización y a su quiebra. Este pánico bancario, que nos acercó a todos el recuerdo de la crisis bancaria del 2008, se contagió al resto del mundo y las cotizaciones de todos los bancos cayeron durante ese mismo día, siendo algunos de los más perjudicados el Signature Bank (declarado también en quiebra el 12 de marzo) y el First Republic Bank (finalmente rescatado pero con una caída en bolsa de más del 80% en menos de una semana). Tuvo que salir el mismo presidente Joe Biden a intentar transmitir tranquilidad a sus compatriotas y a asegurar que no ocurrirá lo mismo que sucedió en 2008.
Una semana más tarde, el miércoles 15 de marzo, cuando todo parecía calmarse por momentos, llegó el turno de Europa con el banco suizo Credit Suisse como protagonista. Otra noticia relacionada con la falta de liquidez hizo caer fuertemente la cotización del banco suizo y volvió a sentirse miedo entre los inversores. El pánico y la falta de liquidez a la petición de los clientes de retirar el dinero puso en duda la solvencia de este coloso del sector bancario (que ya arrastraba problemas desde hace varios años), y tuvo que venir a su rescate el UBS, el otro gran banco suizo, que a cambio de hacerse con el banco y sus problemas, se hace más grande y más sistémico que nunca. Para ajustarse al precio de compra por UBS, las acciones de Credit Suisse se desplomaron un 55% en una sola jornada el lunes 20 de marzo. Aún con el Banco Central Europeo intentando tranquilizar a los mercados, los bancos europeos volvieron a tener grandes caídas en los mercados.
Por último, entre el jueves 23 y el viernes 24 de marzo, el pánico financiero se cebó con el principal banco alemán, el Deutsche Bank, haciendo que sus acciones cayeran más del 12% en alguno de los momentos de la sesión bursátil del viernes y volviendo a arrastrar a los bancos de toda Europa a caídas importantes.
Esta duda de la solvencia de los bancos ha traído el dilema de si seguir subiendo los tipos de interés para combatir la inflación o dejar de hacerlo para intentar detener la sangría en el sector bancario. El Banco Central Estadounidense decidió subir los tipos de interés 0,25 puntos en lugar de 0,5 puntos el pasado 22 de marzo, pero sin embargo, al Banco Central Europeo no le tembló el pulso y anunció un día más tarde una subida de tipos de otros 0,5 puntos. El BCE quiere cortar la inflación por lo sano, pero no quiere que el pánico siga apoderándose en los mercados, y es por ello que envió un mensaje tranquilizador avisando de que inyectará la liquidez que sea necesaria para responder a la eventual crisis bancaria que estamos viviendo.
Todos estos hechos tan alarmantes han provocado que los bancos de todo el mundo hayan tenido un mes de marzo muy negativo en bolsa. En España, el Banco Santander ha perdido durante marzo algo más del 6%, el BBVA más de un 8%, y Bankinter y Sabadell más del 17%. En el resto de Europa más de lo mismo, con el BNP Paribas francés dejándose alrededor del 14%, el también francés Crédit Agricole cayendo cerca del 9%, el holandés ING alrededor del 17%, el HSBC británico más de un 13%, su compatriota Barclays más del 17%, el italiano Intensa San Paolo alrededor del 7%, el suizo UBS cerca del 6% y el Deutsche Bank alemán llegando a caer casi un 20% en el mes de marzo. Y en los Estados Unidos, donde empezó todo, lo mismo, con Wells Fargo y Bank Of America dejándose en marzo más del 15%, y el Citigroup, el JP Morgan y Morgan Stanley más del 9%.
La verdad es que han sido caídas bastante abultadas, pero también es verdad que la mayoría de los bancos europeos llevaban varios meses con subidas muy importantes, tanto que Santander o BBVA por ejemplo llevan los últimos seis meses subidas mayores al 40% en bolsa. Los bancos franceses también llevan meses haciéndolo muy bien, con los más importantes acumulando subidas mayores al 20% desde finales de 2022, y prácticamente igual en el resto de Europa, con subidas cercanas también al 20% incluso en la cotización del Deutsche Bank. Es decir, quién haya comprado acciones de cualquiera de estos bancos hace unos meses, seguiría llevando una ganancia bastante importante pese a las verticales caídas de este mes de marzo.
En mi opinión, las caídas de las cotizaciones de la mayoría de los bancos en el mes de marzo han sido solamente causadas por el contagio, y cuando se esfume este miedo lo lógico sería que retomaran la tendencia alcista que llevaban desde hace aproximadamente medio año.
Y para acabar de hablar ya del sector bancario, os dejo una imagen que me ha parecido muy interesante y que descubrí hace unos días investigando sobre el tamaño de los bancos europeos y queriendo informarme sobre la dimensión de la adquisición del Credit Suisse por parte de UBS. Me ha parecido curioso, por ejemplo, que UBS no era muchísimo más grande que Credit Suisse, que los principales bancos franceses son bastante más grandes que los principales bancos alemanes, y también la cantidad de bancos chinos que hay con un tamaño colosal.
Dejando a un lado al sector financiero, si nos fijamos en los índices más importantes del mundo, pese a todo lo ocurrido este mes, el SP500 ha acabado marzo con alzas del 3%, el Nasdaq100 es el que mejor se ha comportado terminando con subidas cercanas al 9%, el Eurostox50 ha subido algo menos del 2,5%, nuestro Ibex35 ha perdido cerca del 1% y el índice de los mercados de economías emergentes se ha mantenido prácticamente plano.
Por comentar alguna de las empresas que sigo y que tengo en mi cartera, destacar por un lado subida de Meta Platform, que tras haber sufrido un fuerte castigo los últimos tiempos, lleva una subida cercana al 70% en lo que llevamos de año. Mencionar también el caso de la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, ya que en marzo parece que se ha aclarado un poco más y su cotización subió más del 5% el 24 de marzo acercándose un poco más al precio de la OPA de 94 dólares por acción. Y también subrayar que aunque parezca que estemos inmersos en una crisis bursátil, las empresas tecnológicas más grandes del SP500 han subido muchísimo en lo que llevamos de año (desde el 1 de enero): Apple casi un 32%, Amazon y Microsoft alrededor del 20%, Alphabet un 16% y Tesla cerca del 90%.
En el mundo cripto, los problemas relacionados con los bancos parece que han tirado para arriba las cotizaciones de la mayoría de las criptomonedas, con Bitcoin subiendo más del 20% en marzo y Ethereum más del 12%. Muy interesantes estas revalorizaciones, no por las fuertes subidas en sí, sino porque por fin se han comportando como lo que deberían ser, una reserva de valor.
¿Qué podemos esperarnos en abril?. Sigue habiendo analistas que predicen que pronto se anunciará una recesión y hará caer muy fuerte a las bolsas, y otros que dicen que lo peor ya ha pasado y puede que las bolsas ya estén de nuevo en una tendencia alcista. Como siempre, nadie tiene ni idea, y los que llevan prediciendo caídas fuertes día sí y día también durante 20 años seguidos, por estadística, seguro que algún día aciertan. Si tuviera que mojarme, a priori creo que abril debería ser un mes tranquilo, y si eso ocurre, lo normal sería que las bolsas se mantuvieran relativamente tranquilas y que sigan subiendo poco a poco, pero os recuerdo que esto es bolsa, que el mercado es un ser maníaco-depresivo y que de un día para otro todo puede cambiar.
Compras
Este mes parece que he hecho muchas compras, pero alguna de ellas ha sido debido a una pequeña rotación que he hecho en cartera. Concretamente, me he deshecho de las acciones del REIT del sector de la salud OHI (Omega Healthcare Investors), ya que me temo que si recortan el dividendo (tiene pinta que lo harán pronto) su cotización bajará bastante. He aprovechado a vender la posición de este REIT de residencias con pérdidas, para vender también algunas acciones de la petrolera ExxonMobil, la cual la tengo con bastantes beneficios. De esta manera, compenso las pérdidas de una con las ganancias de la otra para que no tenga impacto a la hora de pagar impuestos. Además, aunque haya vendido OHI con pérdidas, con los dividendos que me ha ido pagando, el cómputo final de haberla tenido en cartera no me ha generado pérdidas. El dinero obtenido con estas dos ventas lo he destinado a abrir una pequeña posición en la también petrolera Petrobras (tiene su riesgo, pero de momento espero que haga la función de OHI pagándome un generoso dividendo), y en añadir unas pocas más de T. Rowe Price (sigue estando entre mis top 3 de empresas favoritas) y de la farmacéutica Amgen (ha bajado mucho últimamente, la considero sector defensivo, y además lleva años subiendo mucho su dividendo). Por otro lado, he vuelto a comprar alguna acción más de HP, Verizon, Micron Technology, Advance Auto Parts y Home Depot.
En cuanto a fondos y ETFs se refiere, como siempre, he seguido aportando como cada mes al fondo True Capital, a los fondos indexados y al ETF de semiconductores (este mes no he aportado al ETF indexado Nasdaq, ya que tengo ya una posición considerable y he preferido empezar a aportar una única vez cada dos o cada tres meses).
Hewlett-Packard (HPQ): Sigo añadiendo mes a mes a mi cartera alguna acción de esta empresa tecnológica tan conocida. Se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 3,5% a día de hoy). Aunque llevo ya unos meses comprando, todavía el peso que tiene en cartera es mínimo, así que la idea es seguir comprando poco a poco más acciones.
Verizon (VZ): AT&T y Verizon son las dos más grandes telecos estadounidenses, y aunque funcionen con bastante deuda y lleven unos años algo detestadas por los inversores, aunque no creo que vayan a crecer mucho los próximos años, sí creo que seguirán ganando cada año más dinero y seguirán repartiendo un dividendo bastante alto a sus accionistas (a los precios comprados en marzo, Verizon rentaba alrededor del 7% vía dividendos). Además, lleva varios años teniendo que desembolsar muchísimo dinero para invertirlo en el 5G, y se espera que los próximos años ya no tenga que hacerlo en tan gran medida y genere más liquidez que pueda utilizar para sanear un poco sus balances. Seguiré ampliando posición poco a poco.
Amgen (AMGN): Empresa pionera en biotecnología que descubre, desarrolla y produce fármacos innovadores (cardiología, nefrología, metabolismo óseo…). Lo más probable es que siga creciendo a un ritmo bastante fuerte, y junto a la caída en bolsa que ha tenido desde máximos, y al dividendo tan interesante que reparte cercano al 3,5% y bastante creciente, me espero retornos de más del 10% anual los próximos años. Ya tengo unas cuantas acciones de ella en cartera, pero si sigue a estos precios o baja algo más, puede que amplíe un poquito más.
Home Depot (HD): Vuelvo a añadir alguna acción más de esta empresa minorista estadounidense de mejoras del hogar, ferretería, bricolaje, materiales de construcción, decoración, jardinería… Básicamente, es algo así como la que tenemos en España Leroy Merlin. Lleva muchos años aumentando sus ventas, su beneficio y su dividendo de manera bastante considerable, y aunque actualmente los pronósticos no son demasiado alentadores para la economía en general, tiene una gran cuota de mercado en los Estados Unidos que seguro le permite seguir creciendo fuerte los próximos años. Junto con su política de dividendos crecientes (este año lo ha aumentado un 10% y paga a día de hoy un 3%), también tiene una política muy fuerte de recompra de acciones, haciendo que cada año haya menos acciones de Home Depot en circulación y el beneficio por acción aumente. La llevaba tiempo queriendo tener en cartera, aproveché la corrección de febrero para abrir posición en ella, y seguiré comprando sobre todo si la sigo viendo por debajo de 285 dólares.
Micron Technology (MU): Añado también alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector de los semiconductores y que está en la cartera de inversores tan prestigiosos como Monish Pabrai o Li Lu, la cual consideran que está cotizando muy barata. Además de producir muchos tipos de semiconductores (una de las cinco empresas que más semiconductores producen en el mundo), también fabrica diferentes tipos de memorias (por ejemplo memorias flash). Tiene previsiones de crecer a ritmos muy altos, y su PER actual es inferior a 10 mientras que otras empresas de sus sector (Qualcomm, Broadcom, Nvidia, Texas Instruments…) superan los 30 veces beneficios, lo que hace que parezca que cotiza muy por debajo de su valor. De momento mi posición en ella es muy pequeña, pero la idea es ir aumentándola los próximos meses.
T. Rowe Price (TROW): Aunque ya es una de mis posiciones más importantes en cartera, no descarto ampliar un poco más si su cotización sigue bajando. Es una empresa de gestión de capitales que lleva muchos años haciendo las cosas bien, sus cuentas y su balance son impecables, cada año tiene mayores beneficios, tras las grandes caídas generales ofrece una rentabilidad por dividendo ya muy generosa superior al 4,5%, y lo lleva aumentando años de manera bastante generosa. Lo pasará mal una temporada, de hecho este año ha aumentado pero muy poquito el dividendo, pero aún así, creo que tiene las cuentas muy bien saneadas para que no tenga ningún problema en solventar cualquier crisis que se le ponga en el camino, y cuando los mercados vuelvan a ser alcistas, volverá a ganar mucho dinero y a destinar buena parte de dicho dinero en repartir dividendos y recomprar acciones.
Advance Auto Parts (AAP): También añado alguna acción más de esta cadena estadounidense líder en venta y distribución de accesorios y todo tipo de productos para el mantenimiento y reparación de automóviles y camiones ligeros. Además de vender productos vía online, cuenta con unos 5.000 puntos de venta repartidos por Estados Unidos y Canadá, y también cuenta con otras 1.250 tiendas con nombre Carquest (Carquest fue adquirido por Advance Auto Parts hace unos años) repartidas por las Bahamas, México y las Islas Vírgenes Británicas. Actualmente compite sobre todo con dos monstruos como son Autozone y O’Reilly Automotive, y mientras que estas dos no han parado de subir su cotización en bolsa, la cotización de Advance Automotive ha caído considerablemente desde máximos haciendo que su PER (relación beneficio por acción) le haga ser a priori la más interesante de las tres Puede que se nos esté escapando algo, pero tiene pinta de que los próximos años sus beneficios sigan creciendo, su dividendo siga aumentando (rentabiliza actualmente alrededor del 5%) y siga recomprando acciones haciendo que el beneficios por acción crezca. Además, este tipo de empresas debería comportarse bien en épocas de crisis, ya que la gente tiende más a reutilizar coches antiguos e intentar repararlos antes que comprarse un nuevo coche. No la tenía en el radar , pero una vez abierta posición en ella, probablemente seguiré comprando acciones de Advance Auto Parts los próximos meses.
Petrobras (PBR): Multinacional brasileña que se dedica principalmente a la exploración, producción, refinación y comercialización de petróleo y gas natural. Durante 2022 repartió unos dividendos fuera de lo común, destinando a las accionistas bastante más dinero de lo que valía su cotización. Gana cantidades descomunales de dinero, sobre todo cuando el precio del petróleo está alto, y aunque con la llegaba de Lula da Silva al poder lo lógico sería que dejara de destinar tanto dinero a pagar dividendos, creo que seguirá siendo bastante generoso y el resto del dinero lo destinará a reinvertirlo para seguir creciendo. He destinado poco dinero a comprar acciones de esta empresa, ya que aunque me gusta, la considero bastante arriesgada ya solo por el simple hecho de ser brasileña.
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Tal y como he comentado, me he deshecho de la posición entera de Omega Healthcare Investors y he vendido alguna acción de ExxonMobil.
El sector de REITs de salud, como residencias de ancianos, me gusta bastante a largo plazo, pero el dividendo tan grande que está pagando Omega Healthcare Investors no me parece sostenible tras la caída de la cotización que ha tenido los últimos meses. Como creo que recortarán el dividendo y eso conllevará a una bajada de su cotización, he preferido deshacerme de ella y evitar este posible «problema».
Fijándonos en la venta de algunas acciones de ExxonMobil, las tengo con mucho beneficio porque las compré prácticamente en el momento más duro de la pandemia, cuando su cotización estaba por los suelos. Quería deshacerme poco a poco de una parte de la posición, porque a los precios que se encuentra el dividendo ya no es tan generoso, considero que es una empresa que no debería crecer mucho (ni su dividendo tampoco), y siendo cíclica puede que ya haya pasado su momento de fuertes subidas y pronto vuelva a su ciclo bajista.
Con la pequeña rotación en cartera y el resto de las compras realizadas durante marzo, la cartera quedaría de la siguiente manera:
Dividendos
Los dividendos cobrados en marzo han sido los siguientes:
Dye & Durham (DND)
Visa (V)
Flex LNG (FLNG)
Amgen (AMGN)
Microsoft (MSFT)
S&U (SUS)
ExxonMobile (XOM)
Realty Income (O)
Organon & Co (OGN)
Blackrock (BLK)
Home Depot (HD)
Unilever (ULVR)
T. Rowe Price (TROW)
Gilead Sciences (GILD)
Objetivo Abril
Por un lado, lo de siempre, seguiré realizando mis aportaciones periódicas en los fondos indexados (SP500, MSCI World y Emergentes), el fondo True Capital, el ETF indexado al Nasdaq y el ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, seguiré realizando compras pero con cautela. En marzo los mercados han tenido subidas y tenemos al SP500 casi en los 4100 puntos, por lo que lo más seguro es que en abril compre algo pero aproveche para aumentar algo la liquidez. Si no veo caídas interesantes en el SP500, seguiré realizando pequeñas compras de empresas como Best Buy, HP, Verizon, Micron Technology, Advance Auto Parts o incluso Home Depot. Si por el contrario, hay caídas que lleven al SP500 a niveles cercanos a los 3.800 puntos, mis preferencias a día de hoy, además de las mencionadas previamente, serían las siguientes empresas: Broadcom, T. Rowe Price, Amgen, Alphabet, Berkshire Hathaway y S&U.
En cuanto a las criptos, mi idea era volver a entrar en Bitcoin si veía su precio caer por debajo de los 15.000 euros aproximadamente, pero como no tiene pinta de que se dé ese escenario al menos en un corto plazo, tengo bastante claro que me mantendré quieto y seguiré teniéndolo todo en «stake» dándome una rentabilidad anualizada cercana al 4%.
Otras
Aunque considero que la venta de derivados es muy peligrosa y que solo se debe hacer cuando se tiene suficiente experiencia invirtiendo y destinando un porcentaje muy pequeño de la cartera, este mes he aprovechado las caídas del sector bancario y que mi peso en derivados es muy pequeña ya para realizar una venta de una «put» de Banco Santander con vencimiento en diciembre del 2026 a un precio de 2,5 euros. De esta manera, he cobrado una prima de dinero en marzo, pero me veré obligado a comprar acciones del Banco Santander en diciembre de 2026 si su cotización cae por debajo e 2,5 euros. A priori parece algo difícil que tenga que ejercer la compra en 2026, pero cuando se realizan estas operaciones hay que ser muy conscientes de que todo puede ocurrir y tener mucho cuidado. Además, hay que demostrar al broker que se tiene suficiente liquidez (o dinero invertido en acciones) para que el broker no te solicite ingresar más dinero).
Después de un inicio de año muy alcista, en la segunda quincena de febrero hemos vuelto a ver caídas en los mercados y se vuelve a apoderar un poco el miedo entre los inversores. Uno de los aparentes motivos por los que han vuelto a tensionarse las bolsas es el último dato de inflación de los Estados Unidos, y es que a pesar de los esfuerzos de la Reserva Federal para controlarla (lleva tiempo subiendo los tipos de interés), los últimos datos no han sido muy esperanzadores y puede que la FED tenga que seguir subiendo tipos.
Así, aunque durante la primera mitad del mes seguíamos viendo a las bolsas subir, con las bajadas que se han dado a finales de mes febrero, los índices de los principales mercados del mundo han acabado planos o con ligeras pérdidas. El SP500 ha bajado cerca de un 3,5%, el Nasdaq100 un 3% y el índice de los mercados emergentes es el que peor se ha comportado perdiendo alrededor del 7%. Europa se ha comportando algo mejor, manteniéndose el Eurostoxx50 plano y subiendo el Ibex35 algo más que el 1%.
Aún así, todavía estamos bastante lejos de los mínimos que se dieron entre septiembre y octubre del 2022, donde el SP500 llegó a tocar los 3.557 puntos (un 12% mas abajo que los 3.982 puntos que ha marcado el 28 de febrero). Como siempre, sigue habiendo gente que pronostica bajadas del SP500 de hasta un 20% desde los niveles actuales (lo mismo pronosticaban con el SP500 en 3.557 puntos), otros aún más catastróficos que dicen que si la recesión es fuerte podríamos ver al SP500 caer incluso un 40% (igual que lo que pronosticaban con el SP500 en 3.557), y otros que cuando ven tres días seguidos de subidas dicen que lo peor ya ha pasado y que los mercados han descontado ya el peor de los escenarios. Personalmente, no me creo ninguno de esos pronósticos, no me desvío de mi camino y continúo aplicando mi estrategia: seguir invirtiendo mes a mes en fondos indexados sin importar lo que hagan las bolsas y comprar acciones de empresas que me parecen buenas de cara a un largo plazo (a poder ser con beneficios crecientes y con poca deuda).
En cuanto a las criptomonedas, la mayoría de ellas muy volátiles, como siempre, pero centrándonos en las dos más importantes, Bitcoin y Ethereum, ambas con ligeras ganancias del entorno al 2% durante febrero. Yo sigo manteniendo lo que me queda de Bitcoin y de Ethereum en «stake» obteniendo una pequeña rentabilidad por ello, y tengo bastante claro que no voy a hacer ninguna compra/venta en el mercado cripto durante marzo.
Compras
Como seguimos con mucha incertidumbre y las tendencias de las bolsas parece que siguen siendo a la baja, este mes tampoco he realizado muchas compras. He vuelto a comprar alguna acción suelta de HP, Verizon y Best Buy, y he aprovechado las caídas de finales de febrero para añadir una acción más de Amgen e incorporar dos nuevas empresas en cartera, Home Depot, la cual llevaba en mi radar desde hace bastante tiempo, y Advance Auto Parts, empresa por la que me he empezado a interesar a mediados de febrero.
Por otro lado, como siempre, he seguido aportando como cada mes al fondo True Capital, a los fondos indexados, al ETF indexado al Nasdaq y al ETF de semiconductores.
Hewlett-Packard (HPQ): Sigo añadiendo mes a mes a mi cartera alguna acción de esta empresa tecnológica tan conocida. Se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 3,5% a día de hoy). Aunque llevo ya unos meses comprando, todavía el peso que tiene en cartera es mínimo, así que la idea es seguir comprando poco a poco más acciones.
Verizon (VZ): AT&T y Verizon son las dos más grandes telecos estadounidenses, y aunque funcionen con bastante deuda y lleven unos años algo detestadas por los inversores, aunque no creo que vayan a crecer mucho los próximos años, sí creo que seguirán ganando cada año más dinero y seguirán repartiendo un dividendo bastante alto a sus accionistas (a precios de hoy, Verizon reparte alrededor del 6,7%). Además, lleva varios años teniendo que desembolsar muchísimo dinero para invertirlo en el 5G, y se espera que los próximos años ya no tenga que hacerlo en tan gran medida y genere más liquidez que pueda utilizar para sanear un poco sus balances. Seguiré ampliando posición poco a poco.
Best Buy (BBY): Añado otra acción más de esta empresa estadounidense del sector consumo que se dedica a vender artículos de electrónica. Es un mix entre las conocidas Fnac y Media Markt, que cuenta con más de 1000 tiendas (principalmente en los Estados Unidos) y lleva años vendiendo muchísimo y con enormes beneficios que destina en abrir nuevas tiendas, en recomprar acciones y en repartirlo entre sus accionistas en forma de dividendos. Seguramente las cuentas de Best Buy se resientan y los próximos resultados sean peores que a los que acostumbra, pero a priori controla muy bien su deuda y siendo líder en su sector, no debería pasar apuros. A precios actuales, ofrece un dividendo superior al 4% y suele aumentarlo considerablemente año tras año, pero aún no sabemos lo que lo aumentará este año (probablemente menos que lo habitual dadas las circunstancias económicas actuales). Mi idea es seguir comprando poco a poco más acciones de Best Buy, aunque ya tengo una posición decente y empezaré a darle algo más de importancia a los precios de entrada.
Amgen (AMGN): Empresa pionera en biotecnología que descubre, desarrolla y produce fármacos innovadores (cardiología, nefrología, metabolismo óseo…). Lo más probable es que siga creciendo a un ritmo bastante fuerte, y junto a la caída en bolsa que ha tenido desde máximos, y al dividendo tan interesante que reparte cercano al 3,5% y bastante creciente, me espero retornos de más del 10% anual los próximos años. Como ya dije en resúmenes anteriores, no descarto que alguna otra empresa más grande como pueden ser Pfizer o Merck & Co quieran hacerse con ella, lo que sería una buena noticia para su cotización. Ya tengo unas cuantas acciones de ella en cartera, pero si sigue a estos precios o baja algo más, puede que amplíe un poquito más.
Home Depot (HD): Abro posición en esta empresa minorista estadounidense de mejoras del hogar, ferretería, bricolaje, materiales de construcción, decoración, jardinería… Básicamente, es algo así como la que tenemos en España Leroy Merlin. Lleva muchos años aumentando sus ventas, su beneficio y su dividendo de manera bastante considerable, y aunque actualmente los pronósticos no son demasiado alentadores para la economía en general, tiene una gran cuota de mercado en los Estados Unidos que seguro le permite seguir creciendo fuerte los próximos años. Junto con su política de dividendos crecientes (este año lo ha aumentado un 10% y paga a día de hoy un 2,8%), también tiene una política muy fuerte de recompra de acciones, haciendo que cada año haya menos acciones de Home Depot en circulación y el beneficio por acción aumente. La llevaba tiempo queriendo tener en cartera, y he aprovechado la corrección de febrero para abrir posición en ella. Volveré a hincarle el diente los próximos meses si sigue estos precios o baja algo más.
Advance Auto Parts (AAP): También abro posición en esta cadena estadounidense líder en venta y distribución de accesorios y todo tipo de productos para el mantenimiento y reparación de automóviles y camiones ligeros. Además de vender productos vía online, cuenta con unos 5.000 puntos de venta repartidos por Estados Unidos y Canadá, y también cuenta con otras 1.250 tiendas con nombre Carquest (Carquest fue adquirido por Advance Auto Parts hace unos años) repartidas por las Bahamas, México y las Islas Vírgenes Británicas. Actualmente compite sobre todo con dos monstruos como son Autozone y O’Reilly Automotive, y mientras que estas dos no han parado de subir su cotización en bolsa, la cotización de Advance Automotive ha caído considerablemente desde máximos haciendo que su PER (relación beneficio por acción) le haga ser a priori la más interesante de las tres Puede que se nos esté escapando algo, pero tiene pinta de que los próximos años sus beneficios sigan creciendo, su dividendo siga aumentando (rentabiliza actualmente alrededor del 4,3%) y siga recomprando acciones haciendo que el beneficios por acción crezca. Además, este tipo de empresas debería comportarse bien en épocas de crisis, ya que la gente tiende más a reutilizar coches antiguos e intentar repararlos antes que comprarse un nuevo coche. No la tenía en el radar , pero una vez abierta posición en ella, probablemente seguiré comprando acciones de Advance Auto Parts los próximos meses.
ETF Lyxor Multi Nasdaq 100: Vuelvo a hacer mi aportación mensual en este ETF de las empresas tecnológicas estadounidenses de mayor capitalización bursátil (Alphabet, Microsoft, Tesla…).
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Como suele ser habitual en mi estrategia de inversión, no he realizado ninguna venta durante febrero, y tras las compras y los altibajos de las cotizaciones durante este mes, mi cartera quedaría de la siguiente manera:
Dividendos
Los dividendos cobrados en febrero han sido los siguientes:
National Health Investors (NHI)
Verizon (VZ)
British American Tobacco (BATS)
Abbvie (ABBV)
Realty Income (O)
Omega Healthcare Investors (OHI)
Dye & Durham (DND)
Objetivo Marzo
Por un lado, lo de siempre, seguiré realizando mis aportaciones periódicas en los fondos indexados (SP500, MSCI World y Emergentes), el fondo True Capital, el ETF indexado al Nasdaq y el ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, seguiré realizando compras pero con cautela. Las bolsas han corregido bastante en febrero, pero todavía no se ven precios de derribo así que intentaré contenerme porque la idea es seguir manteniendo liquidez por si se dan mejores oportunidades. Si no veo caídas interesantes en el SP500, seguiré realizando pequeñas compras de empresas como Best Buy, HP, Verizon, Micron Technology o Advance Auto Parts. Si por el contrario, hay caídas que lleven al SP500 a niveles cercanos a los 3.800 puntos, mis preferencias a día de hoy, además de las mencionadas previamente, serían las siguientes empresas: Broadcom, Home Depot, T. Rowe Price, Amgen, Alphabet, Berkshire Hathaway.
En cuanto a las criptos, mi idea era volver a entrar en Bitcoin si veía su precio caer por debajo de los 15.000 euros aproximadamente, pero como no tiene pinta de que se dé ese escenario durante marzo, tengo bastante claro que me mantendré quieto y seguiré teniéndolo todo en «stake» dándome una rentabilidad anualizada cercana al 4%.
Otras
En febrero he presentado el Modelo 720, modelo que se debe presentar si el patrimonio depositado en el extranjero supera los 50.000 euros. Es decir, si por ejemplo se tuviera una cartera de acciones en el broker Degiro que supere los 50.000 euros a 31 de diciembre del 2022, será obligatorio presentar dicho modelo como muy tarde el 31 de marzo del 2023. Yo ya lo tuve que presentar el año pasado, y me costó un poquito saber cómo hacerlo porque los tutoriales que había en internet no estaban enfocados a residentes en Bizkaia, así que decidí escribir una especie de manual/tutorial en una entrada. Ese tutorial me ha venido de maravilla este año, ya que aunque hay que invertir algo de tiempo en rellenar el documento, al menos no he tenido que estar buscando cómo hacerlo con miedo a hacerlo mal. Si alguno de vosotros superó esa cantidad de 50.000 euros fuera de España a finales del 2022, os animo a que echéis un vistazo a este «tutorial para presentar el modelo 720 en Bizkaia» y no esperéis hasta el último día para presentarlo.
Por otro lado, con la escalada de los tipos de interés y los beneficios récord que están obteniendo las entidades financieras, los bancos (al menos los online) están subiendo algo la remuneración por tener el dinero depositado en sus arcas. Ya os comenté en entradas anteriores que e Banco Sabadell ha mejorado su promoción de su cuenta remunerada, ya que ahora nos da un 2% de rentabilidad.
También MyInvestor ha sacado una promoción tanto para nuevos como «no nuevos» clientes, y es que ha aumentado la rentabilidad de su cuenta remunerada también al 2% durante un año. Siendo nuevo cliente, el dinero depositado rentará ese 2% que se remunerará cada mes, y siendo ya cliente de MyInvestor, el dinero que depositemos hasta finales de marzo, nos rentará también un 2% que se pagará mes a mes durante un año completo.
Y ya por último, aunque no sea cliente de Renault Bank, avisaros que ha vuelto a subir la remuneración de su cuenta que ya alcanza el 1,61% de rentabilidad anual y que también se cobra mensualmente. No tengo cuenta con ellos porque de momento prefiero beneficiarme para ello de Sabadell o de MyInvestor, pero no descarto algún día abrirme una cuenta en este banco francés.
Empieza el año con subidas en las bolsas de todo el mundo, y podemos ver al SP500 cotizando a 4.076 puntos a cierre de mes, un 14% más arriba de los mínimos vistos en octubre del pasado año. En aquel entonces, con el SP500 en los 3.577 puntos, los analistas preveían que el índice estadounidense podría seguir cayendo todavía un 30% más, pudiendo llegar a ver a primeros de 2023 al SP500 por debajo de los 2.500 puntos. Pues bueno, volvemos a confirmar que nadie tiene la bola de cristal y nadie sabe hacia dónde se moverán las bolsas en el corto plazo.
Así, durante enero, el SP500 a subido un 6%, el Nasdaq100 (durante 2022 uno de los más castigados) mas de un 10%, el índice de los mercados emergentes alrededor del 5%, y tanto el Eurostoxx50 como nuestro Ibex35 un 8%.
En el mundo cripto lo mismo, mes con subidas para la mayoría de las criptomonedas. Si nos fijamos en las dos de mayor capitalización, el Bitcoin ha subido nada más y nada menos que un 38% en enero, y el Ethereum parecido, teniendo una revalorización cercana al 32%.
En cuanto a la inflación, parece que se ha estabilizado y va poco a poco a la baja, y en cuanto a los tipos de interés, parece que la próxima subida de tipos podría ser algo más pequeña que las anteriores. Estos dos aspectos deberían ser positivos para los mercados, pero esto es bolsa, y en este mundo las predicciones solo son eso, predicciones, predicciones que cambian de la noche a la mañana.
Pese a ello, la mayoría de los «expertos» siguen diciendo que la recesión está a la vista. ¿La tendremos? ¿La evitaremos? Y si de verdad llega, ¿Cómo nos afectará? ¿Afectará a los mercados o ya está todo descontado? Personalmente, no tengo ni idea de si se dará o no, pero lo que no voy a hacer es fiarme de las predicciones de los «expertos».
Compras
Como últimamente las bolsas se niegan a darnos mejores oportunidades de entrada, no he hecho compras destacadas este mes de enero.
Aún así, mi objetivo era ampliar posición en alguna de las empresas que tengo en el radar si las bolsas seguían en estos niveles o si subían, y así lo he hecho, comprando algo más de las cuatro siguientes: Micron Technology, HP, Best Buy y Verizon.
Por otro lado, como siempre, he seguido aportando como cada mes al fondo True Capital, a los fondos indexados, al ETF indexado al Nasdaq y al ETF de semiconductores.
Best Buy (BBY): Añado alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector consumo que se dedica a vender artículos de electrónica. Como la he presentado en anteriores resúmenes, es una especie de híbrido entre las conocidas Fnac y Media Markt, que cuenta con más de 1000 tiendas (principalmente en los Estados Unidos) y lleva años vendiendo muchísimo y con enormes beneficios que destina en abrir nuevas tiendas, en recomprar acciones y en repartirlo entre sus accionistas en forma de dividendos. En épocas de crisis, si la gente tiene menos dinero para consumir, es obvio que las cuentas de Best Buy se resientan, pero a priori están bastante saneadas como para pasar apuros, y creo que no tendrá pegas para seguir repartiendo dividendos altos y crecientes (a precios actuales entorno al 4,2% de rentabilidad). Ya he formado una posición decente de Best Buy en cartera, pero mi idea es seguir sumando poco a poco alguna acción más de ella.
Hewlett-Packard (HPQ): Casi todos tenemos algún artículo de esta empresa tecnológica en nuestras casas o si no, seguramente lo tenemos cerca en nuestro lugar de trabajo. Se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 3,5% a día de hoy). También me gustaría ir añadiendo poco a poco acciones de esta empresa a mi cartera.
Verizon (VZ): AT&T y Verizon son las dos más grandes telecos estadounidenses, y aunque funcionen con bastante deuda y lleven unos años algo detestadas por los inversores, aunque no creo que vayan a crecer mucho los próximos años, sí creo que seguirán ganando cada año más dinero y seguirán repartiendo un dividendo bastante alto a sus accionistas (a precios de hoy, Verizon reparte alrededor del 6,4%). Seguiré ampliando posición poco a poco.
Micron Technology (MU): Añado también alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector de los semiconductores y que está en la cartera de inversores tan prestigiosos como Monish Pabrai o Li Lu, la cual consideran que está cotizando muy barata. Además de producir muchos tipos de semiconductores (una de las cinco empresas que más semiconductores producen en el mundo), también fabrica diferentes tipos de memorias (por ejemplo memorias flash). Tiene previsiones de crecer a ritmos muy altos, y su PER actual es inferior a 8 mientras que otras empresas de sus sector (Qualcomm, Broadcom, Nvidia, Texas Instruments…) superan los 30 veces beneficios, lo que hace que parezca que cotiza muy por debajo de su valor. De momento mi posición en ella es muy pequeña, pero la idea es ir aumentándola los próximos meses.
ETF Lyxor Multi Nasdaq 100: Vuelvo a hacer mi aportación mensual en este ETF de las empresas tecnológicas estadounidenses de mayor capitalización bursátil (Alphabet, Microsoft, Tesla…).
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Como suele ser habitual en mi estrategia de inversión, no he realizado ninguna venta durante enero, y tras las compras y los altibajos de las cotizaciones durante este primer mes del año, mi cartera quedaría de la siguiente manera:
Dividendos
Los dividendos cobrados en enero han sido los siguientes:
Broadcom (AVGO)
Best Buy (BBY)
Hawlett Packard (HPQ)
Iron Mountain (IRM)
Merk & Co (MRK)
Grupo ACS (ACS) He optado por nuevas acciones
Red Eléctrica (REE)
Repsol (REP)
Altria (MO)
Iberdrola (IBE) He optado por nuevas acciones
Objetivo Febrero
Por un lado, lo de siempre, seguiré realizando mis aportaciones periódicas en los fondos indexados, el fondo True Capital, el ETF indexado al Nasdaq y el ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, lo mismo que en enero, seguiré realizando compras pero con cautela. Con las bolsas en los niveles actuales, intentaré contenerme y la idea es seguir manteniendo liquidez por si se dan mejores oportunidades, pero también seguir realizando pequeñas compras de Best Buy, HP, Verizon y Micron Technology. Aunque después de un enero con pocas compras, puede que en febrero me anime un poco más y abra posición en Home Depot (llevo ya tiempo con ganas de comprar aunque me gustaría que las bolsas caigan algo para entrar en ella), o amplíe posición en alguna de las que siguen en mi radar: Broadcom, T. Rowe Price, Amgen, Alphabet, Microsoft o Berkshire Hathaway.
En cuanto a las criptos, tal y como se han «disparado» en enero, tengo bastante claro que me mantendré quieto y seguiré teniéndolo todo en stake dándome una rentabilidad anualizada cercana al 4%.
Otras
Aunque ya lo avisé en la entrada anterior, aprovecho otra vez para recordaros que Banco Sabadell ha mejorado su promoción de su cuenta remunerada, ya que además de darnos un 2% el primer año, abriéndola antes del 31 de marzo nos ingresa 25 euros a cada uno haciéndolo con el siguiente código de referencia: CC2C4759E1BC15DB. Aquí tenéis algo más de información de dicha cuenta remunerada.
Cuando son buenos tiempos para los mercados bursátiles y las bolsas no paran de subir, nadie quiere quedarse fuera y todo el mundo quiere invertir y ganar dinero como lo está haciendo su vecino que ha comprado acciones del Ibex o como lo hace su compañero de trabajo que invierte en un fondo de empresas tecnológicas de los Estados Unidos. Entre 2010 y 2020 es lo que ocurrió, que el SP500 (las 500 empresas más grandes de los Estados Unidos) subía y subía, haciendo que fuese muy sencillo ganar dinero incluso invirtiendo sin cabeza. Cualquiera podía invertir 1.000 euros en acciones de cualquiera de las empresas del SP500, y al de dos meses ya veía que su inversión le estaba dando rentabilidades positivas. Fue una década de subidas anuales de más del 10% y era prácticamente imposible perder dinero.
Sin embargo, cuando los mercados se dan la vuelta y toca vivir meses (o incluso años) con las bolsas en tendencia bajista, los inversores ven que sus carteras de inversión se ponen en negativo y se mantienen con pérdidas durante un periodo de tiempo relativamente largo, la mayoría de ellos no tiene paciencia y acaba vendiendo con pérdidas y repudiando la inversión en bolsa. Muchos de estos inversores no vuelven a invertir nunca más en renta variable, y otros lo hacen cuando los mercados vuelven a vivir años alcistas pero subiendo ya demasiado tarde al tren.
Yo que llevo ya unos años invirtiendo y conozco gente que ha empezado a invertir recientemente, he podido ver con mis propios ojos cómo algunos de ellos empezaron a invertir muy motivados después de la crisis del covid, pero han dejado de aportar durante 2022 tras las bajadas que se han dado durante todo el año y ver sus carteras en negativo. La psicología es traicionera y nos induce a protegernos y no sufrir más perdidas, animándonos a no invertir más cuando vemos nuestros fondos o nuestra cartera de acciones en pérdidas.
Está estadísticamente comprobado que en temporadas de mercados alcistas hay muchísimo interés en invertir y es cuando el número de inversores es más alto, y que cuando los mercados son bajistas es cuando el número de inversores más se reduce y la gente pierde completamente el interés por invertir.
Obviamente, lo ideal sería tener la varita mágica y saber cuándo vamos a empezar a vivir un mercado alcista, cuándo se va a terminar, cuando va a ser el día exacto en el que entraremos en un mercado bajista y cuándo retomará la senda alcista. Pero esto es imposible, nadie lo sabe, ni Warren Buffet, ni George Soros, ni Blackrock ni Bill Gates. Todos sabemos que habrá temporadas con las bolsas cayendo y temporadas con las bolsas subiendo, y sabemos también que históricamente aunque hayamos pasado por mercados de todo tipo (bajistas, alcistas, e incluso laterales), a largo plazo la tendencia es que las bolsas suban y vayan batiendo récords con el paso de los años.
Recientemente he visto un video en youtube con pequeñas tomas de entrevistas a Peter Lynch (inversor que consiguió rentabilidades superiores al 25% anual durante más de 10 años) donde él mismo hace mención a la importancia de olvidarnos de las pérdidas y ganancias a corto plazo y de centrarnos en invertir a largo plazo. Os dejo aquí este vídeo del canal «Invierte y gana» que me ha animado a escribir esta entrada, aunque en resumidas cuentas, Peter Lynch nos comenta lo siguiente:
Que en general, el SP500 suele cotizar a un PER entre 10 y 20, y por lo tanto, habrá años en los cuales las bolsas coticen «baratas» (más cerca de PER 10) y otras veces «caras» (PER cercano a 20).
Que el SP500 está a un precio justo actualmente.
Que no tiene ni idea de lo que hará el mercado el próximo año o durante los próximos dos años, pero que está seguro que las bolsas estarán más arriba que ahora dentro de 10 años, e incluso mucho más arriba dentro de 20 años.
Que invirtiendo a largo plazo (a más de 10 años vista), la rentabilidad que obtendrá un inversor cualquiera siempre y cuando sea paciente estará rondando el 7 y el 8% anual. Es decir, un inversor paciente duplicará su inversión al de 10 años.
Que en periodos de inversión cortos, es posible tener altas rentabilidades, pero también es bastante posible perder dinero. En cambio, invirtiendo con un periodo temporal de más de 10 años, las ganancias a obtener anualmente se reducen pero es prácticamente imposible tener pérdidas.
Que el órgano clave del cuerpo para invertir en bolsa es el estómago y no el cerebro. El entorno siempre será aterrador, siempre habrá algo de que preocuparse, y hay que ser capaz de olvidarse de todo y pensar en el largo plazo.
Que después de un mercado bajista es cuando llegan los mayores periodos alcistas, y que por lo tanto, los mercados bajistas suelen ser grandes oportunidades.
A continuación pongo una imagen en donde se muestra cómo a corto plazo se pueden tener tanto altas rentabilidades como grandes pérdidas, pero también cómo a medida que le damos tiempo a nuestra inversión, la rentabilidad obtenida anualmente baja pero la posibilidad de tener pérdidas se reduce al máximo. En el vídeo se muestra el gráfico entre 1950 y 2018, y en este gráfico que os presento se muestra lo mismo pero con datos actualizados hasta el año 2020:
Se ve cómo entre 1950 y 2020, una persona que hubiese invertido en el SP500 en un momento con las bolsas en máximos históricos, podía haber tenido una pérdida máxima del 41% al de un año de haber invertido. En cambio, si hubiese entrado al mercado en el mejor momento, podía haber obtenido un beneficio de hasta el 60% en tan solo un año.
Eso sí, ya en cinco años de inversión, el mismo inversor que entraba con las bolsas en máximos, al de cinco años hubiese perdida sólo un 6% anual, y si hubiese invertido en un momento con las bolsas en mínimos, hubiese podido ganar solo hasta el 30% anual.
Si ya hablamos de un periodo superior, por ejemplo de 10 años, habiendo empezado a invertir en el peor momento (con el SP500 en máximos), sus pérdidas se hubiesen reducido al 4% anual, y habiendo empezado a invertir en mínimos, hubiese podido ganar un máximo del 21% anual.
Y si ya nos vamos a un periodo de tiempo mayor, por ejemplo de 20 años, si el inversor hubiese entrado en el peor momento para hacerlo no hubiese perdido dinero, es más, hubiese ganado un 5% anual. Si hubiese empezado en el mejor momento, hubiese ganado un 18% anual.
¿Qué quiero decir con esto?
Que tenemos que ser pacientes en mercados bajistas y cuando tenemos las carteras en negativo. Nuestra cabeza nos suele decir que no deberíamos haber invertido y nos incita a deshacernos de la inversión asumiendo la derrota, pero la realidad es que si no hemos invertido demasiado mal y mantenemos la calma durante unos cuantos años, acabaremos ganando dinero.
Históricamente, como se ve en el gráfico anterior, a más de 20 años vista, incluso el inversor con más mala suerte del mundo hubiese ganado un 5% anual durante esos 20 años invirtiendo en el SP500, haciendo que 10.000 euros invertidos se hubiesen convertido en más de 26.000 euros. Uno con mucha suerte, si hubiese invertido justo en el mejor momento (algo imposible), esos 10.000 euros los hubiese convertido nada más y nada menos que en 274.000 euros.
Como lo lógico es ni ser adivino ni ser el más desafortunado del mundo, podríamos ponernos en un término medio, el de no haber invertido en el mejor momento ni en el peor momento, o el de invertir mes a mes una cantidad fija durante 20 años. En ese caso, hubiésemos obtenido una rentabilidad anual de entorno al 11% anual, haciendo que 10.000 euros invertidos se conviertan en 80.000 euros pasados 20 años.
Por lo tanto, si alguno que me está leyendo quisiera invertir en renta variable con el objetivo de tener beneficios de aquí a unos meses o de aquí a uno o dos años, le advertiría que no lo haga, ya que sería como jugar a la lotería. Y si por el contrario, quisiera empezar a invertir con el objetivo de generar retornos a largo plazo, recomendaría hacer caso a Peter Lynch, no querer adivinar lo que va a hacer el mercado a corto plazo, e ir invirtiendo poco a poco durante un largo periodo de tiempo en un fondo indexado como puede ser uno que replica al índice SP500 y que puede ser contratado por ejemplo en el neobanco MyInvestor. Aquí os explico más sobre los fondos indexados y cómo contratarlos de manera sencilla.
OTRAS
Aprovecho para avisaros que Banco Sabadell ha mejorado su promoción de su cuenta remunerada, ya que además de darnos un 2% el primer año, abriéndola antes del 31 de marzo nos ingresa 25 euros a cada uno haciéndolo con el siguiente código de referencia: CC2C4759E1BC15DB. Aquí tenéis algo más de información de dicha cuenta remunerada.
Terminamos el año sin el famoso rally de Navidad, y en diciembre las bolsas han retornado a su senda bajista, dejándose el SP500 un 6%, el Nasdaq100 nada más y nada menos que un 9%, el Eurostoxx50 un 4,3%, el Ibex35 un 1,7% y los mercados emergentes alrededor del 2,5%. Por lo tanto, mes bastante malo para las bolsas de todo el mundo.
En el mundo crypto parecido, han vuelto las caídas, y la mayoría de ellas han tenido bajadas de más del 5% este mes.
Resumiendo el año en una única frase, podríamos decir que aunque la última parte del año las bolsas se han tomado un pequeño respiro, lo que más ha destacado ha sido la inflación y el miedo a una futura recesión, y esto se ha traducido en fuertes caídas en los mercados bursátiles y en las criptomonedas durante la mayor parte del año, sobre todo, hasta septiembre.
Personalmente, durante 2022 he maniobrado con bastante tranquilidad y cautela pese a las fuertes caídas, y he seguido mi estrategia Buy & Hold haciendo compras mensuales y diversificando en distinto sectores. La mayor parte de las compras las he hecho en Estados Unidos, y he combinado compras de empresas de alto crecimiento que no reparten dividendo (Alphabet, Nagarro, Meta, Micron Technology, Prosus…), empresas de poco crecimiento pero dividendo alto (Altria, Flex Lng, Verizon, Rio Tinto, ACS…) y empresas con dividendo pequeño pero muy creciente en los últimos años (Visa, T. Rowe Price, Best Buy, Amgen, Broadcom…). Además, he hecho dos operaciones especulativas comprando acciones de Neonode (una situación especial con juicios de por medio) y de Activision Blizzard (Microsoft quiere hacerse con ella) y también he seguido aportando mensualmente a los fondos y ETFs indexados, que sigo pensando que es una apuesta segura a largo plazo.
En cuanto a ventas, he hecho alguna que otra durante 2022, pero más que nada ha sido para comprar alguna otra empresa que me parecía mejor oportunidad, y cuando las bolsas estaban en mínimos (en septiembre), hice una rotación bastante más importante con la intención de no tener beneficios de cara a hacienda y no pagar impuestos por plusvalías en 2023. Así, este año me he deshecho de Pfizer, AT&T, Prudential Financial y Betterware de México, y he recortado posición en empresas como Abbvie, Repsol, Enagás o Exxon Mobile.
En mi cómputo general y desde que empecé a invertir en diciembre del 2015, he acabado 2022 con una rentabilidad del 25%. Este cálculo lo hago solo teniendo en cuenta las compra/ventas realizadas, operaciones de ventas de puts y dividendos obtenidos desde 2015 pero sin tener en cuenta las operaciones realizadas con criptomonedas. Es decir, poniendo como ejemplo el caso de haber invertido desde el inicio 10.000 euros y mi cartera ahora valga 12.000 euros y habiendo recibido 500 euros netos durante estos años como inversor, supondría haber ganado 2.500 euros con 10.000 euros invertidos, lo que equivaldría a una rentabilidad del 25%. Mi récord curiosamente ha sido este mismo año 2022 pero en agosto, en donde mi rentabilidad desde que empecé a invertir llegó al 37,7%. Puede que vea bajar esta rentabilidad un buen porcentaje los próximos meses, pero mi objetivo es llegar al 50% de rentabilidad en poco tiempo.
Mirando los movimientos con criptomonedas, tuve bastante suerte y vendí un poco de Bitcoin al inicio de año antes de que empezaran las caídas. De esa manera, la cantidad invertida en cripto ya llegó a parecerme razonable y no tenía intención de disminuirla más. Aún así, en septiembre me deshice de algo más de Bitcoin con la idea de volver a comprar si vuelve a caer más y se acerca a valores cercanos a 15.000 dólares.
Los movimientos en cartera durante 2022 han hecho que la cartera haya evolucionado de la siguiente manera (tendréis que hacer zoom para poder verlo bien):
Compras
Tras un mes de noviembre con las bolsas ascendiendo, diciembre ha sido otro mes de caídas fuertes, pero como ya empezó el SP500 bastante alto no he realizado compras muy abultadas. Prefiero esperar a comprar fuerte si vemos al índice estadounidense más cerca de los 3.500 puntos, pero mientras tanto, he seguido haciendo pequeñas aportaciones a posiciones que ya tengo en cartera. Así, la aportación más importante que he hecho es la de una acción más de Broadcom, pero también he añadido alguna acción más de HP, Verizon, Micron Technology y Best Buy.
Broadcom (AVGO): Empresa del sector de los semiconductores (uno de los principales fabricantes de circuitos integrados para comunicaciones de banda ancha), que aunque no cotiza a un PER tan bajo como el de Micron Technology, tiene unos flujos de caja muy crecientes los últimos diez años y todo apunta a que seguirá creciendo fuerte ante la gran demanda de microprocesadores que existe actualmente. Cuando abrí posición en ella hace dos meses tenías dudas en qué empresa de este sector invertir, pero al final me decanté por Broadcom bien por sus números como por el dividendo interesante que reparte de alrededor del 3,2% a precios actuales.
Best Buy (BBY): Añado alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector consumo que se dedica a vender artículos de electrónica. Es un mix entre las conocidas Fnac y Media Markt, que cuenta con más de 1000 tiendas (principalmente en los Estados Unidos) y lleva años vendiendo muchísimo y con enormes beneficios que destina en abrir nuevas tiendas, en recomprar acciones y en repartirlo entre sus accionistas en forma de dividendos. En épocas de crisis, si la gente tiene menos dinero para consumir, es obvio que las cuentas de Best Buy se resientan, pero a priori están bastante saneadas como para pasar apuros, y creo que no tendrá pegas para seguir repartiendo dividendos altos y crecientes (a precios actuales entorno al 4,4% de rentabilidad). Mi idea es seguir sumando poco a poco acciones de esta empresa.
Hewlett-Packard (HPQ): Empresa tecnológica que se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 3,9% a día de hoy). También me gustaría ir añadiendo poco a poco acciones de esta empresa a mi cartera.
Verizon (VZ): AT&T y Verizon son las dos más grandes telecos estadounidenses, y aunque funcionen con bastante deuda y lleven unos años algo detestadas por los inversores, aunque no creo que vayan a crecer mucho los próximos años, sí creo que seguirán ganando cada año más dinero y seguirán repartiendo un dividendo bastante alto a sus accionistas (a precios de hoy, Verizon reparte alrededor del 6,6%). Seguiré ampliando posición poco a poco.
Micron Technology (MU):Añado alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector de los semiconductores y que está en la cartera de inversores tan prestigiosos como Monish Pabrai o Li Lu, la cual consideran que está cotizando muy barata. Además de producir muchos tipos de semiconductores (una de las cinco empresas que más semiconductores producen en el mundo), también fabrica diferentes tipos de memorias (por ejemplo memorias flash). Tiene previsiones de crecer a ritmos muy altos, y su PER actual es inferior a 8 mientras que otras empresas de sus sector (Qualcomm, Broadcom, Nvidia, Texas Instruments…) superan los 30 veces beneficios, lo que hace que parezca que cotiza muy por debajo de su valor. De momento mi posición en ella es muy pequeña, pero la idea es ir aumentándola los próximos meses.
ETF Lyxor Multi Nasdaq 100: Vuelvo a hacer mi aportación mensual en este ETF de las empresas tecnológicas estadounidenses de mayor capitalización bursátil (Alphabet, Microsoft, Tesla…).
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Este mes se me vencía la posición de la venta de derivados de Banco Santander, por lo que he estado obligado a comprar 1000 acciones del mismo. Como no es una empresa que me encante y prefiero tener ese dinero en liquidez para otras posibles compras, en cuanto las tuve que comprar las vendí. Las he tenido que comprar a 3 euros aunque cotizasen a 2,72 euros, por lo que he perdido algo de dinero en esta compra/venta, pero al haberme llevado hace unos años una prima de unos 400 euros, al final la operación no me ha generado pérdidas. Además, también me he deshecho de la posición en Betterware de México, empresa que compré por su atractivo dividendo y porque me esperaba un alto crecimiento, pero tras ver que las cosas no le están saliendo demasiado bien y que ha decidido dejar de pagar el dividendo, no me ha temblado el pulso y he preferido vender sus acciones pese a hacerlo con pérdidas significativas.
Tras las compras y ventas realizadas en diciembre, la cartera quedaría de la siguiente manera:
Dividendos
El último mes del año suele ser generoso en cuanto a dividendos cobrados, recibiendo así dinero de las siguientes empresas:
Visa (V)
Flex Lng (FLNG)
Microsoft (MSFT)
Amgen (AMGN)
Exxon Mobil (XOM)
Realty Income (O)
Unilever (ULVR)
Enagás (ENA)
Organon & Co (OGN)
Blackrock (BLK)
T. Rowe Price (TROW)
Gilead Sciences (GILD)
Objetivo Enero
Seguiré realizando mis aportaciones periódicas en los fondos indexados, el fondo True Capital, el ETF indexado al Nasdaq y el ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, lo mismo de siempre, seguiré realizando compras pero con cautela. En los niveles actuales, seguramente haré pequeñas compras de Best Buy, HP, Verizon y Micron Technology. También me gustaría abrir posición en Home Depot si los mercados bajan un poco más, y también continúan en mi radar por orden de preferencia las siguientes empresas: Broadcom, T. Rowe Price, Alphabet, Microsoft, Blackrock y Berkshire Hathaway.
En cuanto a las criptos, como he dicho anteriormente, mi idea es volver a aportar algo a Bitcoin. Vendí parte en septiembre con la idea de volver a comprar si vemos niveles cercanos a los 15.000 dólares. Eso sí, si no cae a esos niveles y empieza a subir, no voy a preocuparme por ello y mantendré ese dinero para otras cosas, como por ejemplo, amortizar más la hipoteca, que con el euríbor cómo está, es casi lo más rentable.
Y pensando un poco más a largo y poniéndonos un objetivo en 2023, prácticamente más de lo mismo. Por un lado, seguir aportando a los fondos indexados y haciendo pequeñas compras de acciones de empresas periódicamente. Por otro lado, después de un 2022 con grandes caídas, veo que podrían darse estas tres opciones:
Opción 1: Que empiece el año con grandes subidas y no volvamos a ver a las empresas cotizar a estos precios. Para mí es la opción menos factible ya que no parece lógico que esto pueda pasar teniendo en cuenta una posible cercana recesión, pero en bolsa todo es posible. Podría haber una tregua en Ucrania, o que la inflación caiga fuerte y vuelvan a tener que bajar los tipos de interés. Si se da esta opción no voy a comprar a lo loco pero como siempre, todas estas aportaciones periódicas que estoy haciendo irán dando sus frutos.
Opción 2: Que continúe la tendencia bajista la primera mitad del año pero que toquemos fondo en verano y las bolsas reboten ya y vuelvan los mercados alcistas. Podría ser que entremos pronto en una recesión y que los inversores entren en pánico extremo haciendo que las bolsas caigan bastante más desde los niveles actuales. Pero una vez que hayan terminado las ventas e incluso los bancos centrales tengan que bajar los tipos de interés, nadie querrá quedarse fuera y es entonces cuando los inversores vuelvan a entrar haciendo que las bolsas suban fuerte. Esta opción es probable que ocurra, pero no sabemos exactamente el tiempo que vamos a estar con los mercados bajistas. Si se da esta situación y seguimos viendo caídas en los mercados los próximos meses, además de las aportaciones periódicas y de las compras pequeñas, haré también compras algo más grandes a medida que el SP500 vaya bajando escalones.
Opción 3: Que tengamos otro año de caídas grandes en los mercados pero que en 2024 veamos grandes subidas. El año 2022 nos ha dejado caídas de entorno al 20% en el SP500 y cercanas al 30% en el Nasdaq. Podría ser que 2023 vuelva a dejarnos caídas de esa magnitud y que pasemos un año entero con las bolsas a la baja, incluso llegando a ver niveles de 2.500 puntos en el SP500. Si ocurre esto, lo lógico sería que las cotizaciones hayan tocado fondo y que 2024 fuese un año maravilloso en el cual los mercados tengan un año muy alcista. Ante esta situación, mi idea sería aportar hasta el último céntimo disponible invertible en empresas de calidad, ya que considero que sería una oportunidad enorme. Está claro que sería duro ver el valor de mi cartera disminuir mucho, pero creo que ya soy capaz de aguantarlo y que es probablemente la opción que más me gustaría que se dé.
Como no sé cual de las opciones se dará, y probablemente acabe dándose otra diferente, lo dicho, iré haciendo compras constantemente y dejaré que el tiempo nos acabe confirmando que invertir a largo plazo es apostar a caballo ganador.
Otras
A día 1 de enero del 2023, lo único que se me ocurre es que mi amigo el carnero de las rocosas os desee…
Aunque todo el mundo espera una recesión y que las bolsas caigan, en noviembre ha habido subidas en la mayoría de los mercados debido principalmente a que los bancos centrales parece que van a moderar sus planes de subidas de tipos.
Así, el SP500 ha subido un 5,3% en noviembre, el Nasdaq100 un 5%, el Eurostoxx50 un 9,6%, el Ibex35 un 4,7% y el índice de los países emergentes cerca del 5,5%. Está bastante tranquilo el mercado bursátil y ha habido muy pocas noticias importantes relacionadas con empresas y con las bolsas en general.
En donde sí que ha habido noticias importantes es en el mundo de las criptomonedas, ya que durante noviembre se han declarado las quiebras de varios exchanges, principalmente de FTX (tercer exchange más grande del mundo) y de BlockFi, lo que ha causado pánico en el mercado haciendo caer fuerte a todas las criptos en muy pocas sesiones. Bitcoin se ha dejado un 16% este mes y Ethereum un 17,5%.
Y como siempre, no sabemos hacia dónde se van a mover los mercados este último mes del año ni cómo empezará 2023. Tan pronto los mercados vuelven a darse la vuelta y volvemos a ver mínimos, como les da por tirar para arriba haciendo que este 2022 haya sido una de las mejores oportunidades de la historia para invertir. Lo lógico sería que venga esa recesión tan esperada, que las empresas tengan peores resultados que años anteriores, y que haya bajadas en sus cotizaciones. Pero también puede ser que la recesión no sea tan grave y los mercados ya la hayan descontado y poco a poco volvamos a ver a las empresas aumentar sus beneficios. Como nadie lo sabe, creo que lo mejor es no intentar ser adivino y seguir aportando mes a mes, pero siempre teniendo suficiente liquidez para imprevistos y para aportar más fuerte si los mercados nos ofrecen mejores oportunidades de compra.
Compras
Los primeros días de noviembre añadí algo más de Microsoft y de Alphabet a mi cartera, pero después, tras las subidas generalizadas en todos los mercados, he preferido mantenerme tranquilo y solo he comprado alguna acción suelta de Best Buy, de HP y de Verizon.
Aprovechando que tenía cuatro balas para utilizar si el Bitcoin bajaba acercándose a los 16.000 dólares, he aprovechado para gastar una de esas balas y aumentar un poquito la posición en Bitcoin. Las otras tres balas solo las utilizaré si veo más bajadas en su cotización. Para gastarlas, no solo quiero ver bajar a Bitcoin por debajo de los 16.000 dólares, sino que su bajada tendrá que estar acompañada de bajadas generalizadas de las bolsas. Si no van de la mano, no las gastaré.
Alphabet (GOOGL): Me sigue pareciendo la mejor empresa del mundo, y ahora también me parece que sus acciones están baratas. Con la caja neta que tiene puede hacer muchísimas cosas (adquirir empresas, investigar para crecer más fuerte, recomprar acciones…), y aunque su negocio no esté pasando el mejor momento, se cree que los próximos años crecerá a un ritmo superior al 15% anual, que junto con las recompras de acciones que acostumbra a hacer, hace que su PER futuro sea muy inferior al que suelen tener las buenas empresas tecnológicas de crecimiento. No da dividendo pero me espero rentabilidades anuales de más del 15% durante unos cuantos años más.
Microsoft (MSFT): Llevaba tiempo con ganas de añadir alguna acción más de esta pedazo empresa a mi cartera, ya que las acciones que tenía fueron compradas al inicio de la pandemia cuando las bolsas estaban en mínimos. Sigue creciendo y ganando cada año más y más dinero, y además, es una empresa que «ata» a sus clientes proporcionándoles software que es muy difícil que dejen de utilizar y pudiendo meter la inflación a sus precios. Personalmente me encanta esta empresa.
Best Buy (BBY): Añado alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector consumo que se dedica a vender artículos de electrónica. Es un mix entre las conocidas Fnac y Media Markt, que cuenta con más de 1000 tiendas (principalmente en los Estados Unidos) y lleva años vendiendo muchísimo y con enormes beneficios que destina en abrir nuevas tiendas, en recomprar acciones y en repartirlo entre sus accionistas en forma de dividendos. En épocas de crisis, si la gente tiene menos dinero para consumir, es obvio que las cuentas de Best Buy se resientan, pero a priori están bastante saneadas como para pasar apuros, y creo que no tendrá pegas para seguir repartiendo dividendos altos y crecientes (a precios actuales entorno al 4% de rentabilidad). Mi idea es seguir sumando poco a poco acciones de esta empresa.
Hewlett-Packard (HPQ): Empresa tecnológica que se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 3,5% a día de hoy). También me gustaría ir añadiendo poco a poco acciones de esta empresa a mi cartera.
Verizon (VZ): AT&T y Verizon son las dos más grandes telecos estadounidenses, y aunque funcionen con bastante deuda y lleven unos años algo detestadas por los inversores, aunque no creo que vayan a crecer mucho los próximos años, sí creo que seguirán ganando cada año más dinero y seguirán repartiendo un dividendo bastante alto a sus accionistas (a precios de hoy, Verizon reparte alrededor del 6,7%). Seguiré ampliando posición poco a poco.
ETF Lyxor Multi Nasdaq 100: Vuelvo a hacer mi aportación mensual en este ETF de las empresas tecnológicas estadounidenses de mayor capitalización bursátil (Alphabet, Microsoft, Tesla…).
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Este mes ninguna venta, así que con las compras realizadas durante noviembre, la cartera quedaría tal que así:
Dividendos
Los dividendos recibidos durante noviembre han sido los siguientes:
Verizon (VZ)
Natioal Health Investors (NHI)
British American Tobacco (BATS)
Realty Income (O)
Omega Healthcare Investors (OHI)
Abbvie (ABBV)
Dye & Durham (DND)
S&U (SUS)
Objetivo Diciembre
Como cada mes, en diciembre volveré a aportar a los fondos indexados, al fondo True Capital, al ETF indexado al Nasdaq y al ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, como durante noviembre los índices han subido bastante, no creo que me anime a realizar demasiadas adquisiciones, pero sí que haré alguna que otra compra. Si no hay bajadas, seguramente incorporaré algo más de HP, Best Buy, Verizon y Micron Technology mediante compras muy pequeñas. Si hay alguna bajada, me gustaría meter el diente a alguna de las siguientes: Blackrock , Broadcom, Home Depot o T. Rowe Price.
En cuanto a las criptos, en septiembre vendí parte de mi posición en Bitcoin, y en noviembre ya utilicé la cuarta parte de lo obtenido para la compra de algo de BTC. Si en diciembre su cotización se acerca a los 16.000 dólares, puede que utilice otra parte de ese dinero para volver a comprar algo más de Bitcoin. Pero como he dicho antes, compraré únicamente si junto a la bajada de Bitcoin a los 16.000 dólares también caen los mercados bursátiles.
Por otro lado, diciembre suele ser el momento en el que hago la amortización máxima desgravable de la hipoteca. Si por ejemplo durante el año he pagado una cuota de 400 euros al mes de hipoteca haciendo así un total de 400×12=4800 euros y el máximo a desgravar aquí en el País Vasco es 8500 euros, a finales de diciembre amortizo esos 8500-4800=3700 euros.
Eso sí, como se me recalcula la cuota de la hipoteca en abril del 2023 y los tipos de interés están tan altos, el año que viene adelantaré esa amortización que suelo realizar en diciembre a marzo o abril para poder beneficiarme un poco en dicho recálculo.
Y relacionado con Hacienda, también tengo que volver a mirar los beneficios obtenidos este año, y en caso de tener beneficios, decidir si vender algo en pérdidas para no tener que pagar a Hacienda el año que viene por plusvalías. En octubre revisé cuentas y en principio tengo plusvalías pero pequeñas, por lo que no creo que tenga que vender prácticamente nada para evitar pagar impuestos.
Hace varios días, un compañero de trabajo que sabe que me gusta mucho todo lo relacionado con la inversión, me trajo documentación sobre un producto de inversión (una mezcla entre un fondo de inversión y un plan de pensiones) que el mismo banco le había ofrecido contratar junto con la hipoteca para comprarse un piso. No me pareció un mal producto, pero lo que realmente me gustó fue la información que contenía un pequeño folleto que venía junto a dicha documentación y en cuya portada aparecía el mismo título que lleva esta entrada:
Claves de la inversión a Largo Plazo
Sinceramente no me esperaba encontrarme con información interesante, pero en cuanto acabé de leer las veinte páginas del folleto, tuve claro que sería buena idea plasmarlo en una entrada para transmitirlo a mis lectores.
Por lo tanto, tal y como se indica en el folleto, enumeraré y resumiré las ocho claves de inversión a largo plazo que se explican, ya que me han parecido totalmente ciertas y sencillas para cualquier persona, sea inversor o no.
La magia del interés compuesto
Según Albert Einstein, el interés compuesto es la mayor fuerza del universo, y consiste básicamente en reinvertir los beneficios obtenidos cada año, de forma que cada vez se obtienen intereses de un capital inicial mayor. Es el típico efecto bola de nieve.
Como ejemplo, si invertimos 50.000€ durante 25 años al 4,25%, al final de ese plazo tendríamos 150.000€. Pero podemos observar que hemos tardado 15 años en obtener los primeros 50.000€ y tan solo 10 años en obtener los siguientes 50.000€.
Por lo tanto, cuanto antes se empiece a invertir, más potente será el efecto del interés compuesto.
El tiempo juega a nuestro favor
Aunque los mercados puedan pasar por temporadas malas que no sabemos cuanto tiempo pueden durar, cuanto más largo es el periodo, más difícil es perder dinero.
Mirando lo que ha pasado entre 1950 y 2022, una persona que hubiera invertido en renta variable a 12 meses había podido obtener, en el mejor caso, unas ganancias del 61% pero, en el peor, unas pérdidas del -43%.
Si en vez de a 12 meses, hubiera invertido a 5 años, entonces las ganancias máximas habían sido del 30% pero la pérdida máxima también se habría reducido a -7%.
Con esto vemos que, según aumenta el plazo, la probabilidad de obtener ganancias y pérdidas tan extremas se reduce. Por ejemplo, a 20 años vista, el inversor no habría tenido pérdida en ningún caso. Es decir, en un plazo de 20 años, incluso habiendo invertido todo cuando los mercados estaban altos, el inversor hubiese ganado dinero.
Por lo tanto, a la hora de invertir, hay que mantener siempre la visión a largo plazo, a poder ser, a más de 10 años.
Si preguntamos al gurú de las finanzas Warren Buffet cuándo es el mejor momento para empezar a invertir, nos responderá que ya mismo. Hoy mejor que mañana, y ayer mejor que hoy.
La diversificación es la mejor opción
Lo óptimo es diversificar por país, por sectores y por empresas para suavizar los movimientos del mercado. Si combinamos activos cuyos precios se comportan de manera opuesta (cuando uno sube, el otro baja), podemos reducir el riesgo haciendo más pequeñas las oscilaciones de su valor.
Un ejemplo de no diversificar sería el de tender a comprar activos que el inversor conoce, normalmente en su país, porque está más familiarizado con ellos. Esto hace que sus ingresos por actividad laboral, patrimonio inmobiliario y patrimonio financiero están sometidos al ciclo económico nacional, y si le va mal al país, el no estar diversificado geográficamente hará que el movimiento sea muy brusco.
Por lo tanto, deberíamos invertir también en otros países y divisas, e incluso en productos diferentes (renta variable, renta fija, inmuebles…).
La necesidad de rebalancear la cartera a lo largo del tiempo
Dentro de una cartera de inversión, las distintas clases de activos tienen rendimientos y volatilidades diferentes. Por ejemplo, mientras que la renta variable se caracteriza por ofrecer mayores rentabilidades asumiendo un mayor riesgo, la renta fija se caracteriza por ofrecer rentabilidades menores pero a consta de un menor riesgo. La combinación de activos con riesgo y de activos con un riesgo menor debería ser variable en el tiempo. Así, una persona que tenga una jubilación lejana, podría asumir mayor riesgo que una persona que tenga cerca su retiro.
Incluso si hablamos de fondos de inversión, podríamos diferenciar fondos que reparten dividendos de los que no reparten. Mientras que a una persona joven le merece la pena invertir en uno de acumulación que reinvierte sus dividendos, a una persona que ya ha dejado de trabajar podría interesarle más tener más cantidad de dinero invertido en fondos que repartan dividendos.
En cuanto a la ponderación en distintos países o de empresas, si alguno de los países o empresas empieza a ponderar demasiado en nuestra cartera, también podríamos deshacernos de parte de dichos activos para que no ponderen más de lo deseado.
Por lo tanto, el diseño de una cartera debería revisarse cada cierto tiempo.
La ventaja de las aportaciones periódicas
Las aportaciones periódicas hacen que entremos en el mercado en distintos momentos, lo que nos ayuda a diversificar nuestra inversión, ya que contribuye a compensar ciclos bajitas con ciclos alcistas.
Así, habrá momentos que estemos invirtiendo cuando los mercados estén bajos, y otros cuando los mercados estén más altos, haciendo un promedio del precio de compra y evitando invertir todo en un momento no adecuado.
Si por ejemplo aportamos 100 euros todos los meses a un fondo, cuando el fondo cotice a 20 euros compraremos 5 participaciones, pero cuando el fondo esté cotizando a 10, compraremos 10 participaciones. De esta manera, estaremos beneficiándonos en los momentos de mercados «baratos», pero como a largo plazo (al menos históricamente) las bolsas suben, acabaremos consiguiendo un buen precio medio de compra.
Además, se ha demostrado, que una persona que haya invertido todo su dinero cuando las bolsas estaban muy bajas, ha tenido prácticamente la misma rentabilidad que una persona que justo ha elegido el peor día para invertir si dicha inversión la mantienen ambos inversores durante un periodo de tiempo mayor de 30 años. Es decir, no merece la pena acertar cuándo es el mejor momento para invertir si nuestra idea es invertir a largo plazo. Lo mejor es poner el piloto automático, cerrar los ojos, y hacer compras periódicas independientemente de cómo estén los mercados.
El peligro de las decisiones emocionales
A la hora de invertir a largo plazo, hemos de evitar decisiones emocionales motivadas por movimientos bruscos del mercado, ya que dificultan la consecución de nuestros objetivos.
Podemos ver en el siguiente gráfico del SP500, que aunque a lo largo de la historia se han producido diferentes crisis, a largo plazo el mercado ha ofrecido un crecimiento sostenido.
Por lo tanto, un inversor a corto/medio plazo puede verse influido por la amenaza de caídas fuertes de las que le costaría recuperarse, pero en el largo plazo el mercado de renta variable ofrece un rendimiento sostenido.
Llevo ya unos años como inversor, y creo que lo más difícil para sacar rentabilidad a una inversión es saber manejar las emociones. Todo el mundo sabe la teoría, que hay que comprar cuando las bolsas están bajas y vender cuando las bolsas están altas, pero en la práctica, estamos «jugando» con nuestro dinero, y la psicología suele jugarnos muy malas pasadas. Dicho esto, si decidimos invertir, debemos ser conscientes de que a lo largo del tiempo sufriremos periodos de mercados bajistas y tendremos que saber mantener la calma.
La importancia de mantenerse siempre en el mercado
Va un poco de la mano del punto anterior, y es que intentar navegar por los mercados entrando y saliendo buscando siempre el momento ideal para hacerlo es prácticamente una tarea imposible.
De hecho, no debemos intentar predecir hacia dónde van a ir las bolsas a corto plazo, ya que si lo hacemos, lo más seguro es que corramos el riesgo de equivocarnos.
Aunque la recuperación del mercado no esté garantizada, si se saca dinero cuando el mercado está cayendo y luego no se vuelve a entrar en el momento oportuno, se perderán los posibles beneficios que podrían llegar a obtenerse si el mercado se recupera.
El siguiente gráfico es uno de los gráficos que más me gusta enseñar. En él podemos imaginarnos la evolución del precio de una acción cualquiera y nuestra actitud más probable en cada momento.
Por lo tanto, invirtiendo a largo plazo, es más importante mantenerse en el mercado (no estar vendiendo y comprando) que intentar predecir cuándo entrar y cuándo salir.
La importancia de los impuestos y comisiones en nuestra inversión
De la misma manera que ocurre con el interés compuesto, los impuestos y las comisiones que pagamos en nuestra inversión aumentan de manera exponencial a lo largo del tiempo. Es decir, una comisión de un 2% que estemos pagando en un fondo de inversión, a medida que más dinero tengamos invertido, mayor será la cantidad que paguemos de comisión, y por lo tanto, deberíamos tener muy en cuenta a la hora de escoger productos de inversión seleccionar los que menor comisión tengan.
Invertir solo el dinero no necesario (extra)
Voy a añadir otras dos claves que considero imprescindibles.
Por un lado, la de invertir solo dinero que no se va a necesitar en al menos los próximos 5 o 10 años. Como no sabemos cómo van a estar los mercados en los próximos dos años, si invertimos un dinero que vamos a necesitar dentro de dos años para pagar los estudios de nuestro hijo, puede que acabemos recuperándolo cuando los mercados han bajado y perdamos dinero.
Por lo tanto, se debe invertir el dinero que no se necesita a corto/medio plazo. Si tengo 6.000€ ahorrados y sé que dentro de doce meses voy a necesitar 5.000€ para pagar una derrama y durante estos doce meses no voy a poder ahorrar más, jamás invertiré más de 1.000€. Si compro acciones valoradas en 6.000€ y dentro de un año mi inversión está en negativo y vale únicamente 5.000€, no me quedará más remedio que vender mis acciones para pagar la derrama y habré perdido 1.000€.
Productos sencillos de cara a tributar (extra)
Y por otro lado, considero también que es muy aconsejable invertir en productos que sean sencillos de cara a hacer la declaración de la renta. Como experiencia propia, utilizo el broker Degiro para comprar y vender acciones. Estoy muy a gusto con este broker, pero también es verdad que todos los años en abril o mayo me paso unas cuantas horas recopilando los datos para pasárselos a Hacienda. No somos para nada expertos en fiscalidad, y por lo tanto, o pagamos a un asesor o lo hacemos por nuestra cuenta arriesgándonos a hacerlo mal y jugándonos una sanción. Además de la compra/venta de acciones en brokers que no te facilitan documentación, también entraría en el mismo saco la inversión en criptomonedas, de la cual nadie tiene ni idea de cómo tributar.
Tal y como estaba previsto, la última semana de octubre el Banco Central Europeo ha vuelto a subir los tipos de interés un 0,75% para situarlos en el 2%, nivel que no se había visto en Europa desde el año 2009.
Como ya se habrá dado cuenta todo aquel que tiene una hipoteca a tipo variable, el euríbor (índice de referencia hipotecario) sube prácticamente al mismo ritmo que los tipos de interés, y esto hace que los intereses a pagar en nuestras hipotecas aumenten haciendo que la cuota se encarezca. El euríbor ha pasado de estar en negativo a valores superiores al 2,5 en lo que llevamos de año, y al igual que nadie tenía ni idea en 2021 de que esto iba a pasar (los expertos pronosticaban subidas del euríbor pero cómo máximo para llegar a 1 antes del final del 2022), ahora tampoco tienen ni idea de qué valor alcanzará dentro de unos meses, pero sí que se pronostica que siga subiendo a ritmos algo más moderados. Esta subida del euríbor ha hecho que una hipoteca estándar en España a tipo variable se haya encarecido tranquilamente entre 150 y 250 euros mensuales en lo que va de año.
Entonces, ¿Nos cambiarse a una hipoteca de tipo fijo? Actualmente es difícil encontrar hipotecas a tipo fijo a un interés inferior al 3%, y por lo tanto, en mi opinión, no sale muy a cuenta cambiarse. Si nos cambiamos y el euríbor sigue subiendo, obviamente nos saldrá bien la jugada, pero en algún momento el euríbor debería volver a la media histórica del 2%, y por lo tanto, al final, saldríamos perdiendo.
¿Teníamos que habernos pasado a una hipoteca de tipo fijo hace unos meses? Viendo que hace unos meses los bancos nos daban hipotecas a un tipo fijo cercano al 1,5% (o incluso inferior), obviamente, parece que habernos cambiado hubiese sido la jugada perfecta. Pero claro, a primeros de año teníamos al euríbor en negativo, y nadie se imaginaba que iría a subir tan verticalmente hasta los valores actuales (2,57% el día que escribo esta entrada). Por lo tanto, a toro pasado todos somos muy sabios y todos sabíamos que se veía venir una subida del euríbor. Yo, particularmente, no me cambié a una hipoteca fija, y desde luego que ahora no voy a cambiarla. Pagaré más la próxima cuota, pero espero que en los próximos años volvamos a ver al euríbor más abajo y mi cuota vuelva a cantidades inferiores. Mientras tanto, estos años me he ido beneficiando de un euríbor en negativo.
Por otro lado, los datos de inflación publicados el 27 de octubre parecían indicar que la inflación en España se estaba moderando (principalmente por la bajada del precio de la luz y del gas), lo que a priori debería ser una buena noticia para nuestro bolsillo y para la economía en general. Aunque yo no creo que los precios de la luz y el gas se mantengan como en octubre mucho tiempo, y por lo tanto, podría ser que los datos de inflación de noviembre y diciembre vuelvan a ser algo peores. Es más, el 31 de octubre se han publicado los datos de inflación en Europa, que han superado el 10%, lo cual me hace pensar que la forma de medir estos datos en Europa y en España no es la misma y puede que en ocasiones nos intenten ocultar algo en dichas mediciones. Lo que no nos pueden ocultar es los precios que vemos en los supermercados o en las gasolineras, que son tremendamente altos.
Mientras sigue la guerra entre Rusia y Ucrania, la cual lleva ya más de siete meses y parece que se demorará durante un largo tiempo, este mes hemos vuelto a ver cómo se las gastan en China, en donde todos tienen que obedecer las órdenes del presidente Xi Jinping, y si no, él mismo se encarga de sacarte de su cúpula. La invitación a marcharse al expresidente Hu Jintao del Congreso del Partido Comunista de China en directo el pasado 21 de octubre y las duras políticas en la economía del país ha hecho que se vuelvan a tambalear los mercados chinos, y la mayor parte de las empresas tecnológicas chinas cayeron en bolsa tras este hecho magnitudes superiores al 15% en una única sesión (Alibaba y Tencent más de un 15%, y el índice de China alrededor del 10%).
En los mercados bursátiles, la última semana de octubre fue momento para la presentación de resultados de algunas de las empresas más importantes de los Estados Unidos, que por cierto, no han gustado nada a los inversores. Alphabet y Microsoft fueron los primeros. Mientras que Alphabet presentó unos resultados bastante peores de lo esperado y llegó a caer alrededor del 10% ese mismo día (aún así, los días previos subió cerca del 8% y ha acabado el mes perdiendo «solo» un 4%), los de Microsoft no fueron nada malos pero su cotización también cayó cerca del 7% (aunque al igual que Alphabet, los días previos subió más del 10% y ha acabado el mes perdiendo «solo» un 3,5%). El día siguiente fue el momento de Meta Platform, que decepcionó a los inversores, y vimos a sus acciones caer desde los 125$ a los 98$ (alrededor del 25%) en una única sesión bursátil (ha sido la peor parada, acabando octubre con una caída en su cotización cercana al 33%). Varapalo tremendo para una empresa que está apostando fuerte mirando el largo plazo y al inversor no le está gustando nada que esté dejando de lado el presente. Por último, anunciaron resultados Amazon y Apple. Los resultados de Amazon tampoco gustaron nada y después de caer bastante los días de los resultados del resto de las empresas, el día de sus resultados volvió a caer más del 7% (ha acabado octubre en negativo dejándose más de un 11%) pese a que los mercados tuvieron un día muy positivo. En cambio, los de Apple sí que gustaron, o al menos se contagiaron con la sesión tan positiva del Nasdaq del 28 de octubre y su cotización subió más de un 7% (es la que mejor se ha comportado en octubre sumándose alzas de más del 7,5%).
Eso sí, pese a las fuertes caídas de las grandes tecnológicas (las que ponderan cerca del 20% en el SP500) los días de sus resultados, el SP500 ha subido más del 5% y el Nasdaq100 alrededor del 1,5% en octubre. En Europa los mercados se han portado mejor, subiendo el Eurostoxx50 más del 8% y nuestro Ibex35 cerca del 6,5%. El peor parado ha sido el índice de las economías emergentes, que lastrado por las políticas chinas, no acaba de despegar.
¿Qué pasará en las bolsas los próximos días y meses? Si acostumbráis a escucharme o a leer mis entradas, creo que ya sabéis mi respuesta. No tengo ni idea de qué es lo que pasará a corto plazo. Tan pronto vuelven a sonar malas noticias (guerra, recesión, inflación…) y los mercados vuelven a caer fuerte, como termina la guerra en Ucrania o dejan de subir los tipos de interés y a los mercados les da por no mirar para abajo y vuelven a máximos históricos en tres meses. Hay mucha gente esperando a que las bolsas caigan fuerte para comprar, y puede que jamás compren si siguen esperando. ¿Cuánto van a esperar? Si cae un 10%, ¿Comprarán o seguirán esperando? Si cae un 20%, ¿Comprarán? Tal vez para cuando quieran comprar sea demasiado tarde y volvamos a ver al SP500 en niveles superiores a 4500 puntos y se arrepientan toda su vida de no haber invertido en 2022. O puede que esperen y al final acaben comprando empresas a precio de risa y saquen una rentabilidad enorme a su inversión en poco tiempo. Nadie lo sabe. Lo que sí que tengo bastante claro es que a largo plazo los índices tienden a subir, y por lo tanto, quién compre ahora tiene muchísimas papeletas de ganar dinero. Por si os animáis, hace un tiempo redacté el artículo «Cómo empiezo» para aquel que quiera invertir y no sepa cómo empezar a hacerlo.
Pasándonos al mundo cripto, durante octubre Bitcoin ha subido cerca del 4% y Ethereum alrededor del 16,5%. La verdad es que últimamente no estoy muy al tanto de este mundillo, pero me da la sensación de que a la gente se le ha pasado la fiebre por las criptomonedas y se habla poquito de ello ahora. Y precisamente que se hable tan poco de las criptos y que ya no salga constantemente en los medios de comunicación me parece una muy buena noticia y un buen catalizador para volver a ver subidas. Siempre he pensado que el mercado bursátil y el cripto van muy de la mano, y si las bolsas caen las criptos también caerán, pero que hayamos dejado de hablar constantemente de Shiba, Terra, Doge o Bitcoin me parece que es un indicador de que pronto puedan volver a subir sus cotizaciones.
Compras
Dados los precios de las acciones tras las caídas que hemos tenido desde inicio de año, los cuales considero buenos precios de cara a largo plazo, tenía previsto realizar importantes compras repartiéndolas en el tiempo hasta final del 2022. Por lo tanto, durante octubre he salido de compras, y he aprovechado el batacazo de Meta Platform para duplicar mi posición en ella, volver a añadir más peso en T. Rowe Price, comprar alguna acción más de Micron Technology y de Prosus, y volver a especular haciéndome con más acciones de Activision Blizzard. Además, he abierto una pequeña posición en una nueva empresa, HP, la súper conocida sobre todo por sus impresoras y sus ordenadores portátiles:
T. Rowe Price (TROW): La llevo comprando prácticamente todos los meses desde marzo del 2021, e incluso hay amigos que me dicen que siempre compro acciones de la cabra. No es una cabra, es un carnero de las rocosas, un animal capaz de escalar por las montañas con terrenos más desfavorables. Por lo tanto, llevar este animal en su logo es un símil a que T. Rowe Price también es capaz de salir adelante en las situaciones más adversas (crisis, recesiones…), y estoy convencido de que saldrá también adelante esta vez. Aunque ya es una de mis posiciones más importantes en cartera, no descarto ampliar un poco más si su cotización sigue bajando. Es una empresa de gestión de capitales que lleva muchos años haciendo las cosas bien, sus cuentas y su balance son impecables, cada año tiene mayores beneficios, tras las grandes caídas generales ofrece una rentabilidad por dividendo ya muy generosa de en torno al 5%, y lo lleva aumentando años y años de manera bastante generosa. Lo pasará mal una temporada, pero creo que tiene las cuentas muy bien saneadas para que no tenga ningún problema en solventar cualquier crisis que se le ponga en el camino, y cuando los mercados vuelvan a ser alcistas, volverá a ganar mucho dinero y a destinar buena parte de dicho dinero en repartir dividendos y recomprar acciones.
Meta Platforms (FB): La nueva versión de Facebook, la que se ha centrado de lleno en el metaverso. Para mí, una de las empresas que más sobrecastigada está y que más barata cotiza, ya que aunque el metaverso sea su apuesta del futuro y ahora solo le produce gasto, no nos podemos olvidar de que sigue teniendo caja neta y sigue ingresando cantidades inmensas de dinero mediante publicidad gracias a sus redes sociales. Los últimos resultados han sido muy negativos, prácticamente no teniendo beneficios, pero su mismo CEO dijo que apuesta a largo plazo, y por lo tanto, si estamos invertidos en ella deberemos tenerlo en cuenta y no salir espantados si en el corto plazo presenta malos resultados. Creo que si sigue cuidando sus redes sociales y consigue sacar tajada del metaverso, puede darnos buenas alegrías en bolsa a un medio-largo plazo.
Activision Blizzard (ATVI): Empresa de videojuegos estadounidense (Call of Duty, Tony Hawk, Giuitar Hero…) la cual probablemente va a ser comprada en su totalidad por la gigante Microsoft. A principios de 2022 Microsoft hizo una oferta por ella a unos 95 dólares la acción, y aunque los accionistas de Activision Blizzard han aceptado la oferta, se deben superar una serie de aprobaciones en diferentes instituciones para que finalmente se haga efectiva dicha compra. A precios actuales (unos 72 dólares), si la compra se hace efectiva (a los 95 dólares ofrecidos), estaríamos obteniendo un beneficio superior al 25% en aproximadamente medio año (se espera que se haga efectiva en junio del 2023). Ya tengo una posición interesante en ella con el objetivo de venderla cuando la OPA se haga efectiva, pero si el SP500 cae fuerte y veo otras empresas cotizar a precios de derribo, tampoco descarto deshacerme de la posición en Activision Blizzard (no debería caer mucho su cotización mientras siga pendiente la adquisición) para comprar cosas más interesantes. Es decir, si las bolsas no caen mucho más o empiezan a subir, esperaré a que Microsoft se haga con Activision Blizzard llevándome un 25% de beneficio, y si por el contrario, los mercados siguen cayendo fuerte, venderé Activision Blizzard aunque sea con una pequeña pérdida para hacerme con acciones de empresas que más hayan bajado y me parezcan interesantes.
Micron Technology (MU):Añado alguna acción más de esta empresa estadounidense del sector de los semiconductores y que está en la cartera de inversores tan prestigiosos como Monish Pabrai o Li Lu, la cual consideran que está cotizando muy barata. Además de producir muchos tipos de semiconductores (una de las cinco empresas que más semiconductores producen en el mundo), también fabrica diferentes tipos de memorias (por ejemplo memorias flash). Tiene previsiones de crecer a ritmos muy altos, y su PER actual es inferior a 8 mientras que otras empresas de sus sector (Qualcomm, Broadcom, Nvidia, Texas Instruments…) superan los 30 veces beneficios, lo que hace que parezca que cotiza muy por debajo de su valor. De momento mi posición en ella es muy pequeña, pero la idea es ir aumentándola los próximos meses.
Prosus (PRX): Conglomerado holandés (controlado por la sudafricana Nespers) que invierte en empresas tecnológicas, siendo su mayor participación la de la china Tencent (telecomunicaciones, comercio electrónico, inteligencia artificial, redes sociales, publicidad…), motivo principal por el cual compro acciones de Prosus. Mi idea era invertir en Tencent, una de las empresas más grandes del mundo (al nivel de Google), la cual crece a ritmos muy grandes y creo que cotiza barata, pero adquirirla mediante Prosus, a priori, es mejor opción, ya que ya solo la participación en Tencent vale más que Prosus completa. Es decir, las acciones de Prosus cotizan más barato que lo que vale su participación en Tencent en sí, así que el resto de las inversiones de Tencent es como si nos las estarían regalando. He aumento posición en ella tras el batacazo que se ha llevado al caer Tencent más de un 20% en una única sesión.
Hewlett-Packard (HPQ): Empresa tecnológica que se dedica principalmente a la venta de portátiles y otros periféricos para ordenador: teclados, ratones, cascos, monitores, impresoras normales, impresoras 3D, cartuchos de tinta… Ha caído mucho desde máximos y cotiza a un PER muy bajo, lo que incluso la ha hecho ser interesante para el mismísimo Warren Buffet. Tanto Dell como HP cotizan «barato» y aunque no sean empresas que vayan a crecer mucho los próximos años, si las compramos «baratas», podemos beneficiarnos de su crecimiento estable y su buena remuneración vía dividendos a los accionista (cerca del 5% a día de hoy).
ETF Lyxor Multi Nasdaq 100: Vuelvo a hacer mi aportación mensual en este ETF de las empresas tecnológicas estadounidenses de mayor capitalización bursátil (Facebook, Alphabet, Microsoft…).
ETF VanEck Semiconductor: Aportación mensual a este ETF de las mayores empresas de semicondutores del mundo (ASML, Nvidia, Texas Instuments, Taiwan Semiconductors…).
Fondo True Capital FI: Fondo de gestión activa al cual aporto también una cantidad fija mensual. Su equipo gestor pertenece a la empresa True Value Investments, y este fondo en particular es un fondo con unas 40 empresas (Visa, Google, Facebook, Alibaba, Novo Nordisk, Lockheed Martin…), con unas comisiones muy pequeñas, definido como fondo conservador, y que se espera de él una rentabilidad anual de entre el 7 y el 10%. Aquí me meto más al detalle.
Fondo indexado ishares Developed World Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Fondo indexado Vanguard Emerging Markets Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad que «promete» la economía de países emergentes.
Fondo indexado Vanguard SP500 Index: Aportación mensual esperando la rentabilidad de más de un 7% del fondo en los últimos 10 años.
Ventas
Este mes ninguna venta, así que con las compras realizadas durante octubre, la cartera quedaría tal que así:
Dividendos
Los dividendos recibidos durante octubre han sido los siguientes:
Iron Mountain (IRM)
Merck & Co (MRK)
Best Buy (BBY)
Altria (MO)
Dye & Durham (DND)
Realty Income (O)
Chesnara (CSN)
Micron Technology (MU)
Objetivo Noviembre
Como cada mes, en noviembre seguiré haciendo mis aportaciones periódicas en los fondos indexados, el fondo True Capital, el ETF indexado al Nasdaq y el ETF indexado a semiconductores.
En cuanto a la compra de acciones, como este último mes los índices han subido bastante, no creo que me anime a realizar demasiadas adquisiciones, pero sí que haré alguna que otra compra. Entre las candidatas estarían las siguientes: Blackrock , Broadcom, Micron Technology, Best Buy, Home Depot, T. Rowe Price, Meta Platform, Microsoft, HP, Prosus y Alphabet. A Blackrock me gustaría verla por debajo de 600$, a Broadcom cerca de 430$ y a Home Depot por los 260$. El resto me gustan a los precios a los que cotizan.
En cuanto a las criptos, en septiembre vendí parte de mi posición en Bitcoin, y si en noviembre su cotización se acerca a los 16.000 euros (no tiene pinta de que baje tanto), utilizaré el dinero obtenido en la venta para volver a comprar Bitcoin nuevamente.
Otras
Me gustaría volver a mencionar acerca de la tarifa regulada de gas, la TUR. Hace ya un tiempo aconsejé en una entrada pasarse del mercado libre al mercado regulado de gas, ya que los precios del mercado regulado son muchísimo más económicos que los de las tarifas que nos ofrecen en el mercado libre. Pasarse era tan fácil como entrar a la web de Curenergia y contratar la tarifa regulada de manera online, sin esperas telefónica ni colas en sus oficinas. Pues bien, tras insistirnos las últimas semanas en diversos programas de televisión que nos pasáramos al mercado regulado, muchísima gente se está queriendo cambiar, y visto esto, algunas de las empresas comercializadoras de gas han decidido quitar de su página web la opción de hacer el cambio de manera online e incluso ni cogen las llamadas de los clientes o les hacen esperar un largo tiempo hasta ser atendidos. Supongo que estarán en su derecho, pero me parece hasta denunciable lo que están haciendo para evitar que la gente se pase al mercado regulado del gas.
En el caso del gas, no hay ninguna duda de que pasarse al mercado regulado es ahorrar bastante dinero, pero en el de la luz hay más variedad de precios y no es tan fácil elegir la tarifa más económica que mejor se adapte a cada consumidor. Aún así, creo que es conveniente mirar un poco los precios que se están pagando porque lo más seguro es que simplemente con una llamada podamos cambiarnos a una tarifa mejor. Hace unos meses publiqué una entrada tras hacer una comparación entre diferentes tarifas y vi que la mejor tarifa era la del «plan estable de Iberdrola«, y aunque a día de hoy esta tarifa se haya encarecido un poco, me parece que sigue siendo una de las mejores opciones a nuestra disposición.
Por otro lado, vuelvo a mencionar la plataforma de cashback Widilo, mediante la cual obtendremos dinero de vuelta al realizar compras en tiendas tan importantes como Ikea (4%), MediaMarkt (5%), HP (5%), Fnac (2,5%), Booking (4%), Forum (5%) y muchas otras. Ahora que se acercan fechas de compras (Black Friday, regalos para Navidad…), creo que es muy interesante haceros una cuenta en Widilo y ahorraros un dinerito.
Ya hable hace un tiempo sobre la aplicación Gelt, la cual paga en forma de cashback al realizar compras en los supermercados.
No voy a volver a explicar su funcionamiento porque lo hice en esta entrada, pero tras descargármela en octubre del año pasado sigo utilizándola y aprovechándome de algún producto que lo ponen «gratis» en ciertas ocasiones. Es decir, aunque compro muy pocos de los produtos que Gelt pone con cashback, de vez en cuando aparecen algunos que tras comprarlos en el súper te devuelven todo el importe de dicho producto.
También tengo que decir, por experiencia propia, que al llegar a los 20 euros necesarios para solicitar el pago, tardan bastante (más de dos meses) en proporcionar las claves para poder acudir a un cajero a retirarlos, pero funciona perfectamente y siempre pagan. Yo habré ido ya a retirar los 20 euros mediante halcash en más de cinco ocasiones, y estoy a la espera de recibir las claves para otros tres retiros de 20 euros cada uno.
Una vez comentado esto, lo que quería anunciar en esta entrada es el nuevo apartado que podemos encontrarnos en Gelt desde agosto de este verano, el de las Gelt Cards, que con básicamente tarjetas regalo de diferentes establecimientos, y las cuales al comprarlas, Gelt devuelve cierto dinero en forma de cashback (entre el 5 y el 10%). Entre las tarjetas regalo que se pueden adquirir con cashback estarían las de Cepsa (10%), Decathlon (6%), Mango (6%), Media Markt (6%), Primark (6%) y Ikea (6%) entre otros.
Si por ejemplo comprásemos un bono regalo de Cepsa de 50 euros, apto seguido recibiríamos 5 euros en nuestro monedero de Gelt (10% de cashback), y si repostamos 60 euros de diésel en una gasolinera de Cepsa, bastaría con canjear el bono y pagar los diez euros de diferencia.
No se me había ocurrido hablar sobre las Gelt Cards hasta ahora porque todavía no había comprado ninguna de estas tarjetas, pero hoy por fin me he estrenado con una de 25 euros de Decathlon.
Como tenía ya claro que quería comprar en la página web de Decathlon un artículo de 24,99 euros, he entrado en Gelt y he comprado una tarjeta regalo de 25 euros (las hay de 5, 10, 15, 25, 50 y 100 euros) mediante mi tarjeta de débito (aceptan tanto VISA como Mastercard). En ese mismo momento, se me han añadido 1,5 euros a mi monedero de Gelt (el 6%) y ha llegado a mi dirección de correo electrónico un email de Gelt con las instrucciones para descargarme mi tarjeta regalo en PDF.
Ya con el PDF de mi tarjeta regalo descargado, he entrado a la web de Decathlon a comprar el artículo que quería, y al ir a realizar el pago he optado por pagarlo con una tarjeta regalo, y me han pedido introducir el código de referencia y la clave de mi tarjeta regalo (el que aparecía en el PDF previamente descargado).
Es más, en lugar de entrar directamente a la página de Decathlon, como también tengo cuenta en Widilo, he entrado a Decathlon vía Widilo, y me he beneficiado también del cashback del 2,5% que ofrece Widilo para las compras en Decathlon.
Al final, entre Gelt y Widilo, no es que me haya ahorrado mucho dinero, pero por la compra de 25 euros he recibido un total de unos 2 euros de cahback (1,5 euros de Gelt y unos 0,5 euros de Widilo).